Con el cierre de las fábricas durante las primeras semanas de la cuarentena y la caída en la producción asociada a las bajas de personal por enfermedad, el stock de electrodomésticos se redujo considerablemente.

Las dificultades logísticas también han motivado que, en la mayoría de los casos, haya que esperar unos 10 días para la entrega. Además, los precios se han incrementado, en algunos casos entre 20 y 100% con respecto a principios de año.

Otro de los factores que, aseguran los comercios, intervienen en una reducción de la oferta, es que las fábricas y las grandes cadenas especulan con los movimientos del dólar y, al anticipar una posible suba, liberan pocos artículos hasta ver cuál sería el valor de venta ajustado a la nueva realidad.

Lo cierto es que un smart TV Samsung de 50 pulgadas, que a fines del año pasado costaba $ 45.999 hoy se consigue en $ 54.999 (20% de aumento). En tanto, una heladera con freezer Gafa, que valía $ 26.999 se fue a $ 42.999 (59%), mientras una cocina Electrolux multigas de 56 cm subió de $ 29.999 a $ 38.199 (27%), otra Domec, también de 56 cm y multigas, pasó de $ 26.999 a $ 53.499 (98%).

Si alguna persona aprovechó las ofertas de fin de temporada en un aire acondicionado frío/calor, puede haberle ganado a la inflación, ya que uno Carrier de 2900 frigorías, Inverter, pasó de $ 43.999 en los primeros días de la pandemia a $ 54.999 ahora.

Una de las categorías en las que más se ha notado la reducción de la variedad disponible es en las notebooks. Es que, en el marco de las clases a distancia y del trabajo desde casa, adquirieron un protagonismo impensado antes de marzo. En la actualidad, se pueden conseguir –con descuento- a partir de los $ 34 mil, aunque la mayoría parte de $ 40 mil.